En la puerta de mi casa hay una señora que vende Palta. Precisamente en la ventana de mi habitación. Sábados y
domingos me deleita con su cántico: "Palta palta, cremosa la palta" aproximádamente unas
112 veces en una hora, la de la siesta. Desde que me mudé a esta casa, odio la palta.
Compraselas todas y despues las vendes vos cuando te levantas de la siesta jajaja
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